
Mientras continúan las protestas en Estados Unidos por el incidente de George Floyd, los grupos radicales toman el centro de Seattle, Washington un sector llamado Capitol Hill. Después de varios días de manifestaciones, la policía de Seattle decidió concederles varias cuadras de la ciudad para que lo ocuparan e hicieran ahí lo que les diera su gana. Le llamaron Capitol Hill Autonomous Zone (CHAZ) a su pedacito de cielo comunista.
Esto me recuerda mucho cuando en el 2006, los simpatizantes de López Obrador ocuparon el Zócalo y varias cuadras de Ave. Reforma con el beneplácito de las autoridades de la Ciudad de México. En ese entonces protestaban el supuesto fraude de las elecciones y demandaban el conteo “voto por voto”. No llegó a nada el asunto, solo a pérdidas millonarias de los comercios y AMLO justificó la ocupación diciendo que si no se realizaba, iba a estallar una revolución violenta en el país.
Regresando a Seattle, el movimiento Black Lives Matter tomó esta zona más que una forma de protesta, lo declararon su propio país, en la imagen vemos un letrero que dice “You are leaving the USA” (estás saliendo de los Estados Unidos), líderes se están organizando para quedarse buen tiempo solicitando comida, declarando que no habrá presencia policiaca, sin embargo, hay reportes de que hay gente armada que está registrando los que entran, exactamente como la policía, qué irónico.
Entre edificios grafiteados, zonas para fumar, los organizadores tuvieron la gran idea de permitir entrar a los indigentes, después se quejaron de que se acabaron toda la comida. Ahora solicitan que la gente les coopere o que les lleve comida vegetariana, por supuesto.
El presidente Trump ya tuiteó que iba a intervenir con la guardia nacional, a lo cual la alcaldesa de Seattle le contesta que mejor se quede escondido en su búnker. El surrealismo ya es bastante cómico.

Pero ¿qué piden con esta ocupación de Seattle? Publicaron la lista de demandas aquí. Son bastantes, pero quiero destacar algunas para darnos cuenta la mentalidad de estas personas:
- Abolición de toda la policía. Quieren que no exista en Seattle y en el estado de Washington, incluso que le quiten las pensiones a los jubilados. Esto es tan absurdo, por supuesto no sugieren como se guardaría el orden, aspiran un lugar de anarquía.
- Revisión de todos los casos de afroamericanos encarcelados. Curiosamente aquí piden la intervención del gobierno federal para que investigue todos los casos de brutalidad policiaca y por supuesto que reparen los daños.
- Liberen a todos los presos por delitos relacionados por la mariguana. Extraña petición, al parecer quieren que se le limpie el récord a sus compañeros, aquí no es claro si también se le va a considerar a la gente blanca, porque todas las peticiones tienen tonos racistas.
- Liberen a todos los presos. Más adelante piden que liberen a toda la población penitenciaria, ¿para qué hacen la petición anterior entonces? Quiere un sistema de restauración, no cárceles, criminales en las calles ¡hurra!
- Universidad gratis para todos. Siguen las peticiones, ¿qué más da? No cuesta nada pedir. Por supuesto que no tienen idea lo que cuesta mantener un sistema educativo, profundamente ignorantes.
- Doctores negros para pacientes negros. Viene algunas peticiones profundamente racistas y segregacionistas, lo cual llevaría a un Estados Unidos de antes de los sesentas. Nomás faltó que pidieran fuentes de agua para negros y blancos.
Hay que poner mucha atención a lo que está pasando en Seattle porque es la plantilla para que se replique en otros países, en especial en México donde la semana pasada se dieron disturbios parecidos a los de Minneapolis y otras ciudades norteamericanas. Estas medidas de grupos radicales son consecuentadas por gobiernos locales de izquierda y tiene un efecto devastador en la comunidad. Los ciudadanos de bien no deben de permitir que los radicales destruyan en vez de construir, eso es fascismo.