Una de las industrias que la pandemia más ha afectado es el cine. Muchas películas que estaba programadas por salir este verano se tuvieron que posponer y otras definitivamente se fueron directamente a los servicios de streaming, aunque en estos momentos (al menos en México) abrieron los cines, la capacidad de la sala está limitada. Para los asistentes es una mejor experiencia pero para los cines es fatal, están perdiendo mucho dinero.
Y es que no hay mejor forma de ver una película que en una pantalla gigantesca con sonido excepcional, es como los directores quieren que se vean sus obras, pero quizás estamos viendo los últimos días de esta experiencia, mucho tiene que ver el Covid-19 pero es una tendencia que ya lleva años. Por dos factores: los sistemas de entretenimiento de casa y los precios del cine.
Las televisiones cada vez son más grandes y con mayor calidad, pronto llegaremos al 8K en resolución en forma comercial, y aunque el contenido apenas se está produciendo en 4K, algo tienen las nuevas televisiones que hacen ver mejor incluso la definición estándar (720p). Además cada vez hay más ofertas de video en demanda o streaming que pone al alcance de tu mano cualquier película o serie, el internet cada vez es más rápido, haciendo también los canales de televisión obsoletos.
El sonido es muy importante en un sistema de entretenimiento, hace unos años lo mejor era tener un sistema cuadrafónico o surround sound que te envolviera desde cuatro lados, con bajos y medios que intensificaran las escenas. La desventaja era todos los cables y la complejidad, se requería un aparato como cerebro. Ahora con los soundbars que es una aparato de sonido en forma de barra que se conecta a la televisión, suenan increíble y muy fácil de instalar.
¿Para qué saldría alguien de casa para ver una película?
Creo que los cines no van a desaparecer por completo pero sí muchos van a cerrar, siempre habrá público para ver las películas como deben verse, aunque me temo que para soportarlos tendrán que subir más de precio ya sea en la entrada o como realmente hacen dinero, con la comida. Los cines tendrán que dar una experiencia diferente para atraer al público.
Lo que atrae a mucha gente a ir al cine son los estrenos, pero con la reciente decisión de la compañía Warner Bros. de mostrar las películas en streaming al mismo tiempo que en los cines, ese incentivo desaparecerá. La industria tendrá que adaptarse a los tiempos, se tendrán que producir a menor costo (reduciendo salarios y aprovechando la tecnología) e inevitablemente los servicios de video en demanda subirán de precio para compensar.
En estos momentos tenemos a Netflix como el rey pero le está pisando los talones Disney+, Prime Video y HBO Max. Los canales de televisión están muriendo poco a poco, salvo a eventos deportivos, ya no hay razón para tenerlos, aunque todavía gente mayor está muy acostumbrada a ver canales.
Sí hay un gran encanto en el cine, el olor a palomitas y caramelo, los posters donde anuncian las películas, los cortos que te emocionan (muchos de ellos mejores que el filme), el asiento reclinable. El cine es una perfecta cita y una tarde de familia, espero que eso no acabe, pero me temo que ya no es sostenible.
¿Vivirías sin el cine? ¿Prefieres ver las películas en tu casa?